
he estado en un lugar muy extraño
parecido a este, pero algo diferente
un poco más oscuro y lúgubre
tal vez hasta un poco muerto
ya sé que no ha sido mi culpa
sin embargo, me siento culpable
y entonces estás tú
con el guante en mi cara
y yo, sin poder respirar
tras tus golpes te pierdes
te separas de aquello que eras
cuando te conocí
no me reconozco
entre todo el vidrio roto
y la sangre envenenada
que lo cubre todo con paz
de sábanas rojas
me asfixias con la almohada
mientras duermo soñando
con libertad y libertinaje
con el balance perfecto
que parece no existir
voy desgastándome
en el olvido
aquí en la cama
para ver si desapareces
así podré dormir
aunque a veces sienta
que me ahogo
en el agua
tan dulce
soledad
tan dulce